El viernes 7 y sábado 8 de septiembre, tendrá lugar un evento único en la Ciudad de Santa Rosa, La Pampa. Su característica principal es que es un foro realizado por la ciudadanía y para la ciudadanía, donde se busca fomentar el intercambio de conocimientos en relación al uso de la bicicleta como medio de movilidad, pero sobre todo, como herramienta de transformación social.

“Ciudadanía y medios de Comunicación”, “Desarrollo Urbano pensado en la Bicicleta (esto no es Holanda!)”, “Caminabilidad: la respuesta a la ciudad vivible”, “Economía verde y la bicicleta” y “Biciescuela para adultos” son algunos de los títulos de las actividades de este 2do FAB, que propone un diálogo entre ciudadanía, academia y gobiernos con disertaciones, paneles, talleres y conversatorios con participantes de Chile, México y de distintas ciudades de Argentina con un espíritu descentralizador y diverso.

¿Qué hace a este foro un evento único y tan importante? Organizado por la red Argentina en bici, que toma la iniciativa de crear el FAB, movilizada por el deseo de ciudades y calles sin segregación ni desigualdad, en las que se pueda convivir. La equidad es un objetivo importante del foro, por eso se buscó que la participación de disertantes varones no supere el 50% para ofrecer más y mejores oportunidades a quienes normalmente no se les da el espacio.

Además se realizará por primera vez el FAB niñez, que busca incluir a niños y niñas, que por lo general están presentes desde lo discursivo pero no en la práctica, por eso tendrán actividades diseñadas especialmente para ellos, y un espacio de juego tranquilo cercano al escenario para que sus cuidadores puedan disfrutar del evento junto a los más pequeños.

El desafío de la movilidad sostenible es mundial. Por ello, tiene un espacio considerable en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la agenda internacional creada por los estados miembros de las Naciones Unidas, que marcará el rumbo de los próximos 15 años. Pero es en las ciudades donde estos procesos de globalización se localizan y solo un compromiso local podrá ofrecer soluciones y convertirse en el elemento central de las políticas del futuro.